miércoles, 8 de enero de 2014

Y el verbo se hizo carne





Y el verbo se hizo carne 
y habitó entre nosotros... 
(Juan 1:14)

Y el verbo se hizo carne 
y habitó entre nosotros
y fluidos como cemento 
rellenaron nuestros huecos,.
vibrando con las caricias
con orgasmos y con besos.

Cuando hubo que separar
esa amalgama de miembros
ovillados con lujuria,
apretados con denuedo,
perdí parte del cerebro,
un vientre con mariposas,
un día lleno de alegría,
y otras mil valiosas cosas..

Si al menos hubiera muerto,
me habría yo ahorrado este duelo
y en una caja de pino
dormiría bajo el suelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario